Qué hay detrás de todos los lugares
Donde irremediablemente existimos
Fugazmente
Felices o infelices,
Queriendo arrancar la carrocería del coche
Porque era incapaz de hacerme entender.
Era nuestra miseria también lo que nos hacía brillar
Y yo aun veo fuego fatuo en los sitios
En los que fuimos terriblemente tristes
En los sitios en los que nos quisimos como se quieren los átomos.
Seguimos brillando tú y yo dentro de mi cabeza, y aunque intento apagarte con cubos de agua
Eres keroseno, napalm
Petróleo, negro brillante y pegajoso.
No sé que busco porque intento no dar contigo como respuesta.
Porque no quiero ser tan obvio aunque ya me da igual que la gente sepa
Qué hay detrás de este que piensa.
Hoy apareciste mientras me ponía los zapatos para ir a trabajar
Y a veces eres un destello efímero, una brisilla de verano que amansa el espíritu
Y otras, como hoy,
Desastre natural,
El barco cayendo cataratas abajo,
La resignación del que sabe que nunca dejará de ser como es
Porque hay cosas tan nuestras
Y tú eras tan mía
Que no sé qué busco
Ni por qué busco
Ni a quién busco
Que no seas tú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario