Pienso en ti

 La música de fondo del super

La música a tope del bershka

La música de los anuncios de tele5

La música de los coches de kinkis que pasan a toda hostia por una calle peatonal. 

Estás siempre de fondo

Sonando en muchos formatos

Muchos estilos distintos,

En el fondo de mi cráneo,

Un proyector me devuelve tu imagen en forma de fotogramas en las córneas de mis ojos,

Y lo sé porque desde fuera intuyo que se pueden ver mis pensamientos iluminados,

Y se intuye también la nostalgia y las cosas triste que entierro cada noche debajo del colchón. 

Pienso en ti y no te lo mereces. 

Ni yo. 

No quiero seguir sujetando la cuerda que me ata a tu cintura, tu cuello, tus tobillos huesudos y flacos. 

Los vídeos de información del tiempo en el metro,

Los vídeos en las pantallas de los escaparates,

Los vídeos de las islas canarias de tele5,

No dejas de aparecer detrás de mis pupilas, 

En silencio, mientras intento ver el paisaje. 

¿Cuántas veces voy a tener que escribir que estás en todas las cosas?

Y que todas las cosas eres tú, 

o están tocadas por ti, 

O han sido observadas por ti. 

¿Cuándo se acabará esta persecución en la que constantemente me estoy dejando atrapar?

Y tú sin tener ni puta idea. 

Y yo que sí que intento huir hacia adelante

Y me brillan los pulmones

Y quiero lanzarme al mar,

Perder el miedo. 

Y quiero cortar la cuerda,

Ya no te quiero conmigo,

No quiero que la vida me recuerde a ti. 

De fondo, ya no recuerdo tu voz

Pero anoche tu cara se me apareció 

nítida y deslumbrante

Y yo

Literalmente

Me cagué encima. 

Magobio.

Me agobia pensar que: todos los amores de mi vida un día dejarán de serlo. 

Que quien yo creía que me iba a doler para siempre, ha empezado a cicatrizar, 

sin previo aviso. 

Que soltar lastre es bueno 

Aunque tú ya no me leas

Y yo ya no te escriba. 

Me aterroriza pensar que soy una especie de embarcadero, 

un aeropuerto por el que llegan sin billete de vuelta, 

hasta que un día aparecen en el zaguán de casa, 

con las maletas hechas y un pequeño papelito con su número de asiento, 

y cara de adiós-losiento. 

Probablemente yo también haya sido turista en más de un país, 

y otras se habrán sentido tristes de verme partir, 

con un pequeño baúl de souvenirs entre las manos. 

Me agobia pensar que tengo que sujetarme las riendas como a un caballo desbocado, 

que siento fuerte y rápido, 

que tengo que ir midiendo como si fuera una fórmula química peligrosa. 

Me agobia no saber a dónde están yendo todos los pensamientos que podría dedicarte al día si quiero, 

y qué pasará si te vuelvo a ver. 

O me vuelves a ver de lejos. 

Qué pasará contigo. 

Me agobia hacer como que borro tus huellas con hojas de palmera, 

Cuando la realidad es que tus huellas, 

las nuestras, 

seguirán ahí donde las dejamos. 

Y lo único que me queda es compartir y convivir pisando con otros zapatos,

Otras personas, 

En otro espacio-temporal diferente al nuestro. 

No puedo hacer como que no existimos, 

y esto es algo que tengo bien claro. 

Pero me agobia hasta qué punto y en qué profundidad exististe en mí, 

que todo lleva, 

muchas veces, 

tu nombre;

aunque yo ya ni lo lea. 

No quiero confundirte, ni que se me malinterprete: es una pena. 

La realidad es esta y es igual de agobiante que cuando descubrí que 

El amor de mi vida

Iba a tener nombres y rostros diferentes,

Y yo nunca podré saber bien si perdí mi oportunidad

O

Si por el contrario,

Lo mejor siempre está por llegar. 

Otro.

Soy otro

Otro que está improvisando

Que está soltando lastre

Que se está dejando llevar

Que está puesto pal futuro

Que piensa que todo se andará. 

Otro que prepara el desayuno

Que es responsable

Que se droga también 

Que apechuga 

Otro

Que huele la almohada 

Y sonríe

Que madruga para pasear a Beni

Que agradece

Que confía

Que olvida. 

Irremediablemente soy otro

Otro que irremediablemente besa distinto

Piensa distinto

Se entretiene con otras cosas

Sabe muchas cosas nuevas. 

Otro con el que poder hacer la siesta 

Comer sandía al borde de un charco

Cantar mientras otros duermen

Abrazar fuerte hasta la asfixia. 

Otro

Porque ya no soy

Aquel que.